Relatos de la vida de un pueblo de campo. Primera parte (Entre los años 1901 a 1904)
22 de junio de 2015

     La vida en un pueblo de campo, para una muchacha joven, como era mi mujer, que recién se había ausentado de la capital, tiene enormes emociones. Pocos días llevábamos en General La Madrid cuando tuvieron lugar las elecciones provinciales.-
     

FOTO DE LA SEÑORA MARIA INES PICASSO DE CASON (Parrosa)
Se casaron  el 16 de Octubre de 1901

      Serían las 10 de la mañana, estándome afeitando se sintió una serie sucesiva de estampidos, viniendo Parrosa (sobre nombre de su señora) corriendo a decirme “mirà están tirando cuetes” no había terminado de decirme cuando comenzaron a sentirse explosiones más fuertes de armas largas. “Que cuetes ni cuetes, le dije, es un tiroteo, pone enseguida las pavas a hervir agua que van a empezar a traer heridos”.-El tiroteo que duró unos cinco minutos había cesado, cuando me terminé de vestir y me fui a la Comisaria que estaba enfrente de nuestra casa.- No hubo ningún herido, a pesar de que atacaron el atrio a balazos.-

     Esta vida de violencia era una cosa frecuente en esa época.- Hubo noches en que me tuve que levantar hasta tres y cuatro veces para atender heridos, producidos por peleas.-

     A Ortega que era el caudillo, tres veces atentaron contra su vida. Una vez un individuo con un cuchillo le pegó seis puñaladas, pero como era un mandado le pegó con miedo, al punto que Ortega agarrándole el cuchillo por la hoja se lo quitó.-

     Todo bañado en sangre se me presentó en mi consultorio, gritando “Doctor me han asesinado”.- Rápidamente lo examiné comprobando que ninguna de las heridas era grave y antes que llegara la policía le dije.- “Hágase el guapo, esto no es grave, enseguida se curará” Tuve que vendarle las manos, brazos, cabeza, cuerpo  y piernas.-

     A los pocos días pasaba Ortega por una puerta a una cuadra de mi casa cuando se abre la puerta y le disparan un tiro con un revolver 44 de caño largo.- Pero Ortega es como los gatos tenía siete vidas.- Al hacer el disparo el revólver se abrió y el tiro salió para abajo y la pólvora le quemó la cara.-

     El tercer atentado se produjo estando sentado en su escritorio a la noche, por una rendija le dispararon un balazo que no dio en el blanco, se incrustó a dos dedos de la cabeza.-
     


Propiedad donde vivía don Manuel Ortega, posteriormente domicilio de la flia Jouandon y don Benito Peredo (Hoy edificio del Colegio Nacional)

 Después que yo me fui de General La Madrid concluyeron por matarlo un día a la tarde en plena plaza.- Lo mataron como a un perro, cinco individuos a caballo.-

     Pobre Ortega, era un hombre vivísimo y muy flojo, tenía un miedo bárbaro de que lo mataran pues sabía que era el único medio de sacarlo de la actuación que tenía.- Mas adelante relataré  otro hecho sobre Ortega.-

     Un día llegó de comisario de policía a General La Madrid, Mariano Aguirre Paz, que lo habían mandado porque estaba sin tener un centavo y tenía la mujer y cinco o seis hijos chicos.- Arturo mi hermano me escribió recomendándome y pidiéndome lo ayudara en todo lo que pudiera.-

     Nos hicimos muy amigos era un lindo loco que servía para cualquier cosa menos para comisario, pues era un impulsivo y no me explico como no lo mataron por los atropellos y barbaridades que hacía.-

     Un domingo íbamos en un sulky los dos solos a la Estancia de Hoffman y al llegar a la  pulpería  de De la Cuadra, había un grupo de unas 50   ò mas personas jugando a la taba. Sin darme tiempo a que parara el caballo se largó del sulky y a los gritos de “no se mueve nadie” corrió hasta la cancha.- Las armas que llevaba consistían en un estuche con un cuchillito y un tenedor en el bolsillo de arriba del chaleco.- Entre este y el pantalón se le veía siempre la camisa, pues no usaba tiradores y se le caían los pantalones.- Es decir que de lejos se veía que no podía llevar armas.-

     Mientras corría hacia los jugadores, estos dejaban caer sus armas de todo tamaño y calibre detrás de las tablas de una cancha de bochas.-

     Los hizo formar a todos y los registró no encontrándoles como era lógico armas.- Les gritó “ya les he dicho que en el partido no quiero timbas ni taba” “todos van a marchar a la policía” etc.-

     Uno de los paisanos que tenía fama de malo, le dijo “pero Comisario, si no hacíamos más que entretenernos, jugábamos de gusto”, “como nos va a llevar Vd. que es un buen criollo” etc.- A los dos minutos Mariano después de haberse expuesto a que cualquier  borracho como había muchos, le provocaran un incidente les dijo_ “bueno muchachos, sigan jugando, pero que no los vea nadie”.-    

 

                                         JUNIO DE 2015

ALFREDO ESTEBAN CHISTE
www.historiasdelamadrid.com.ar
alfredoestebanchiste@yahoo.com.ar


Guía Telefónica
Historiador Alfredo Chiste

El día 30 del mes de Noviembre de 2018, se cumplen 10 años de la publicación del primer artículo en mi página de “http://www.historiasdelamadrid.com.ar, en [...]

Otras Voces

Por Gerónimo Odriozola, Broker de Remax Roble

Una de las características más importantes que he detectado en grandes empresarios con los que tuve la oportunidad de [...]

CPBA. Informes Económicos

El Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Provincia de Buenos Aires (CPBA) acaba de publicar su más reciente trabajo, denominado “Contratos y su [...]

Fotos del Rey
La Madrid Golf Club
Bomberos Voluntarios de General La Madrid
GLNet Internet
Rafael Hernández. Desarrollo Web