La escena cultural lamatritense tiene muchas formas y recorridos. Juani Vitulli propone, arriba del escenario, un estilo nuevo y propio, con la improvisación y el estilo libre como banderas. El bailarín sostiene: “me gusta poner un tema y ver qué sale”. Recientemente todo dos presentaciones con las que se llevó todos los aplausos y le abre expectativas hacia el futuro. 

“Bailo desde que tengo memoria”, resume. El “Chavo”, Javier Jiménez, “me lo mostró porque le gustaba hacerlo, me enganché y desarrollé mis gustos”, repasa y dice que “nunca nadie me enseño, es más natural. Me mostraron un par de pasos y le saqué lo más que pude”. 
“Me gusta poner música y bailar. Me siento bien con la improvisación y el estilo libre”, subraya el artista lamatritense.
Y explica que el estilo de baile urbano “a mí se me hace entretenido. Es poner un tema y ver qué sale”. Durante el espectáculo “La Noche de las bandas” se llevó todos los aplausos y sobre aquella experiencia apunta: “lo que hice en el escenario nunca lo practiqué, me gusta esperar y ver qué sale”. 
“Mucha gente se sorprende”, confiesa sobre cómo son las devoluciones del público que se sorprende cuando sale al escenario, sea en un teatro, en el Festival de la Creación o en plena calle.  
“Tengo un repertorio bastante amplio para elegir; quiero sentirme bien con el tema. Soy más de esperar a último momento e improvisar. Agarrar el tema y bailar”, dice Vitulli sobre cómo elige la música para bailar. 
Explica que “hay pasos básicos” para el estilo. “Los aprendo para orientarme” pero “elijo el estilo libre”, subraya y cuenta que en su rol como profesor en el Complejo Cultural, si bien practica algunas “coreografías con los chicos quiero llevarlos al aire libre”. 
A la danza “hay que sentirla”, insiste y declara que “he llegado a llorar cuando la música me pega fuerte”.
“Puedo interpretar cualquier tipo de música, igual siempre termino en lo mismo: tengo la idea en la cabeza y que salga lo que salga porque es algo mío”, agrega. Aunque siendo más chico “buceó” en YouTube para conocer un estilo “llegó un momento que no me llenaba entonces empecé a escuchar hip hop. Hay que sentirlo y que te pegue fuerte”, menciona. 
Juani sostiene que para bailar “se requiere mucha práctica” y, en su caso, no va al gimnasio pero sí estirar para no perder la elasticidad.

Impactan los “golpes de fuerza con el cuerpo” que acompaña la música. “Es algo natural”, apunta. 
Reitera que puede interpretar cualquier tema, solo “hay que sentirse contento” y aclara que “nunca una coreografía va a ser idéntica a la otra porque es improvisación libre; antes lo hacía pero ahora no, puede salir para cualquier lado, y eso es lo divertido”, esgrime sobre su don.
Sobre el impacto que causó en la gente subraya que “llama la atención, le encanta. Es algo distinto y la gente se engancha; los comentarios que te llenan y te dan ganas de seguir”.

Así como se apoyó alguna vez en las redes sociales para aprender, también, gracias a su mamá que le compró en un espejo, empezó a utilizar esta técnica “pero me distraen. A veces me filmaba porque a la gente, en pandemia, le gustaba verlos pero ya no lo hago”, indica. 
Juani lleva consigo la cultura del hip hop pero aclara: “yo no rapeo, soy cero improvisación. Sí me gusta con el cuerpo pero no con la boca” y apunta que “es difícil explicar” ese movimiento “porque acá no se hace, hay que sentirlo”, subraya. 
Vitulli es profesor en el Complejo Cultural y aunque reconoce que “al principio con las clases se me complicaba porque en su muchos son chicos y tuve que apelar a los tik tok para engancharlos, me encanta enseñar. Lo mío es improvisar y quiero que salga todo de acá. Por suerte se sumaron un montón porque les gustó y no quiero cansarlos con las coreos”.
¿Qué pasó en tu última presentación arriba del escenario?
-: No me puse a pensar. Cuando la gente aplaude me ayuda un montonazo. Me sentí bien del todo más cuando gritaban, traté de dejarlo todo. Fue todo improvisación y trate de no pensar en el público pero me acuerdo de las cabecitas. Intenté no prestar atención para no desconcentrarme… y me fui.